Olazábal, que igualó su mejor tarjeta en Augusta en los últimos quince años, pasó el corte con mérito y Rahm, que jugará también los cuatro días, sigue lejos de los puestos de honor. García falló el corte.

Justin Rose ha mantenido el liderato en el Masters gracias a una tarjeta al par del campo que sigue haciendo valer el prodigioso resultado del primer día. Esta vez su festival de birdies se redujo a cuatro (tres en la segunda vuelta, libre de bogeys), que hubiesen abierto su diferencia favorable de no haber incurrido en otros cuatro bogeys, todos ellos en los primeros nueve.

Ahora solo cuenta con un golpe de margen sobre los estadounidenses Brian Harman y William Zalatoris, ambos con escaso palmarés en su currículo.

Harman, zurdo, cuenta con un segundo puesto en el Open USA de 2017 como mejor posición en los “grandes”, después de salir líder a la final. Cuenta con las victorias en el John Deere Classic de 2014 y en el Wells Fargo Championship de 2017 y ahora en Augusta pelea por un triunfo de prestigio con dos vueltas de 69 golpes. El primer día con un solo bogey y tres birdies en una espléndida segunda parte y el segundo con un bogey más y nuevamente con tres birdies en los segundos nueve.

Zalatoris, por su parte, tiene menos trayectoria en el Circuito, con un sexto puesto en el Open USA el año pasado como resultado más relevante. Pero quiere seguir demostrando que su juego está creciendo y en Augusta goza ahora del vértigo de un momentáneo segundo puesto que le permite soñar. En la segunda vuelta ha mejorado en dos golpes su tarjeta inicial, en la que tres bogeys le hicieron acabar con 70. En esta ocasión solo el hoyo 9 se le atragantó después de ocho pares consecutivos, ascendiendo en la tabla con cinco birdies en los segundos nueve, tres de ellos en los tres últimos hoyos del campo.

Pero ya asoman cerca Jordan Spieth, ganador de tres “majors”, entre ellos el Masters de  2015 (título al que añade dos segundos puestos), que se ha colocado a dos golpes del líder, empatado con el australiano Marc Leishman, ganador en varias partes del mundo y de cinco torneos en el Circuito Americano, el último el Farmers Insurance Open de 2020, en el que superó por un golpe a Jon Rahm. Su mejor puesto en Augusta es el cuarto de 2013, aunque ha firmado un segundo lugar en el Open Británico en 2015.

Spieth solo ha cometido dos bogeys, uno cada día, pero le ha penalizado enormemente el triple bogey 7 de la jornada inaugural, en el 9. Leishman lleva un torneo un tanto extraño: el primer día sumó cuatro birdies hasta el hoyo 6 y, después, contabilizó otros cuatro bogeys hasta el hoyo 14, para acabar al par. El segundo día ha estado más brillante, con el único bogey en el difícil 11 y seis birdies, tres en cada parte.

También ha reaccionado Justin Thomas, número 2 mundial que con seis birdies y un bogey hoy se ha colocado a tres golpes del líder.

José María Olazábal ha terminado la segunda jornada con una tarjeta de 71, uno bajo par, totalizando 146 golpes y pasó un corte que se le había puesto muy difícil en las últimas temporadas: desde que fallara el corte en 2008, únicamente jugó las cuatro vueltas en 2013 (acabó el 50) y 2014, cuando finalizó en el puesto 34, curiosamente en ambos casos sin ninguna vuelta bajo par.

El comienzo del dos veces Chaqueta Verde no fue muy prometedor, con dos bogeys consecutivos en el 3 y 4. Restó un golpe otra vez en el 8, par 5, y encaró el 9 con ánimo de revancha. Si ayer pagó un caro peaje con doble bogey en este hoyo, hoy se ha sacado la espina firmando tres golpes menos, un brillante birdie que le ponía al par de la jornada.

Luego, respondió al bogey en el 10 con dos birdies, uno en el difícil 11 y otro en el 15, último par 5 del campo, haciendo una demostración de calidad y experiencia en un campo muy largo para un jugador de su edad.

Así, igualó el 71 que había firmado el primer día en 2009 y el segundo en 2015, su major tarjeta en Augusta en década y media.

Jon Rahm sigue siendo el mejor español clasificado, con un total de 144 golpes, el par del torneo, a siete golpes del líder Rose, lejos de lo que se esperaba a pesar de su reciente paternidad. Le está faltando frescura para lograr los birdies que necesita para estar arriba. El primer día solo se desvió con dos birdies y dos bogeys y su jornada de hoy ha seguido parecido guión (tres birdies-tres bogeys) que le ha permitido repetir el par de su primera tarjeta y mantenerse a la misma distancia de la cabeza.

Sergio García, tuvo un comienzo de vuelta realmente notable, con tres birdies hasta el hoyo 5, pero acabó los nueve primeros con dos bajo par. En la segunda mitad se cambió la tónica y sumó tres bogeys, el último en el 17, que le hicieron firmar el par del día y quedar fuera del torneo por un golpe. No pudo levantar el 76 inicial.


Jesús Ruiz Golf