Louis Oosthuizen saldrá a la final del Open Británico con un golpe de ventaja sobre Collin Morikawa, después de una tercera vuelta que trajo emoción, pero no cambios significativos en Royal St George’s. Hubo un momento en que parecía que el sudafricano crearía un cómodo colchón de golpes para protegerse durante la final, pero sus dos birdies hasta el 9 se convirtieron en nada con los bogeys que sumó en el 11 y 13. Sin embargo, Oosthuizen evitó el triple empate con Morikawa y Spieth que asomaba en el horizonte, con un trascendental par en el 15 que le alivió tanto que le permitió dar un paso al frente con un nuevo birdie, en el 16.

Oosthuizen, que también lideró el torneo al término de cada uno de los dos días anteriores, terminó su vuelta con un 69 (tres birdies, dos bogeys) y comenzará mañana con la mira puesta en su segundo British, once años después del primer éxito, en St. Andrews.

El debutante en el Open, Morikawa, tuvo la oportunidad de unirse al sudafricano en el -12 con un putt para birdie en el 18, pero no lo consiguió y tendrá que perseguir su sueño de nuevo en la final, tratando de convertirse en el primer debutante del Open en ganar desde Ben Curtis en 2003. El jugador de 24 años comenzó mal, haciendo bogeys en el 2 y 5 para distanciarse a cuatro golpes del líder, pero un birdie en el 7 y un putt impresionante para otro en el 8 hicieron que su vuelta volviera a la vida. Y no se puede olvidar que desde que Ernie Els levantó su segundo título, en 2012, los siete campeones han sido ganadores por primera vez del prestigioso trofeo. Ahora Morikawa tiene la oportunidad de ampliar su leyenda y ganar su segundo major en su debut, después de haberlo hecho en el PGA del año pasado.

Jordan Spieth (cinco birdies, cuatro bogeys) comenzará la ronda final a tres golpes del mejor resultado, después de igualar los 69 golpes de Oosthuizen. Pero el norteamericano quizá no duerma bien dando vueltas a su espantoso final de tercera vuelta, con dos bogeys consecutivos en el 17 y 18 que arruinaron lo que podía haber sido una buena tarde. Demostró lo suficiente como para sugerir que en la final será un peligroso rival por el título, pero el norteamericano sabe que no puede permitirse esos errores nuevamente.

Esta tercera vuelta se esperaba que algunos de los favoritos iniciaran un ataque que recortara diferencias, pero Jon Rahm, Dustin Johnson, Brooks Koepka y Sergio García no llegaron a ser amenaza para el líder sudafricano. Quizá el que más pueda preocupar a los primeros sea Rahm, quien encontró tres birdies en los últimos siete hoyos para un 68 que recortaba otro golpe de diferencia con la cabeza. Remontar cinco golpes es mucho, pero si alguien puede superarlo es el actual campeón del Open USA, que ansía convertirse en ganador del Open Británico por primera vez.

Jesús Ruiz Golf