Carlota Ciganda y Azahara Muñoz no han podido resarcirse de la discreta segunda jornada que tumbó sus opciones de medalla en la prueba femenina de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Sin embargo, el tercer día de competición ha dibujado el camino a seguir en los 18 hoyos que restan de competición en el Kasumigaseki Country Club, para acabar el torneo de la manera menos dolorosa posible.

Esta tercera jornada ha concluido sin apenas movimiento en la clasificación para las dos españolas: la golfista navarra es vigésimo novena con -2 en el total, a seis golpes de unos diplomas olímpicos que se antojan inalcanzables, y Azahara Muñoz es cuadragésimo octava con +5.

En el resultado de ninguna de las dos vueltas con sello español se adivina una gran reacción al resultado de la segunda jornada y hay que escarbar para encontrar rasgos positivos. Y es que ninguna de las dos tiene intención de dejarse ir, ni mucho menos. Contemplen la tarjeta de Carlota Ciganda, de 70 impactos (-1), y entenderán este comentario.

La golfista de Ulzama volvió a poner su vuelta en marcha con un bogey en el hoyo 11. Se le escapó algún birdie por esos primeros nueve hoyos –sólo cazó el del 15-, y en su lugar se topó con tres mazazos consecutivos en forma de bogey en el 17, 18 y 1, que podían haberla tumbado definitivamente, cuando todavía le quedaba media jornada por delante.

Pero Carlota Ciganda se levantó y siguió pegándole bien al drive, la faceta que mejor rédito le ha dado en este torneo. Todavía se le escapó algún birdie antes de enlazar esa secuencia que debe darle impulso de cara a este sábado: birdie-eagle-birdie del 5 al 7. Parcial de -4 para levantar una vuelta que se había empinado de mala manera.

Azahara Muñoz, por su parte, sigue en la búsqueda de una estabilidad con el drive que le permita seguir la directriz marcada en los días previos: encontrar siempre calle para no jugar desde el peliagudo rough de Kasumigaseki CC. En esta tercera jornada, resuelta con 73 golpes (+2), no ha terminado de encontrar la clave.

La andaluza enganchó una segunda tarjeta consecutiva sobre par con un solo birdie y tres bogeys, consecuencia principalmente de su desacierto con el drive. El primer bogey le llegó al acabar sus primeros nueve, en el 18, y en el 3 sumó el segundo. Recortó diferencias con el birdie en el 6 pero en el 8, par 5, firmó el último bogey de una ronda “dura” en la que, según contaba la protagonista, le pegó a la bola peor que en las dos jornadas anteriores. El objetivo ahora es reencontrar sensaciones y luchar por poner un buen final a esta segunda aventura olímpica.

Por la parte alta de la tabla, nadie le tose a la número uno del mundo. Por tercer día consecutivo, Nelly Korda ha jugado bajo par (69), si bien su tercera ronda ha estado lejos de la brillantez de la segunda, en la que dio todo un golpe de autoridad. Acertó con tres birdies en los seis primeros hoyos y un inesperado bogey en el 8, par 5, pareció “aconsejarle” que posiblemente era mejor nadar y guardar la ropa que arriesgar.

La menor de las hermanas Korda domina con -15 y tres golpes de ventaja sobre la india Aditi Ashok (hoy 68), que actualmente es la número 200 del Ranking Mundial pero que está jugando con la seguridad de quien se desenvuelve habitualmente en los domingos de los majors. Por detrás aparece un grupo de cuatro jugadoras para dar emoción al reparto final de medallas: la australiana Hannah Green, la neozelandesa Lydia Ko (medalla de plata en Río), la japonesa Mone Inami y la danesa Emily Kristine Pedersen, ganadora del Race to Costa del Sol 2020.


Jesús Ruiz Golf